La primera etapa del conjunto capitalino en la pretemporada consistirá en realizarle exámenes médicos a los jugadores para determinar su condición física.
Acto seguido, los dirigidos por Manuel Plasencia tendrán una semana de adaptación en la capital antes de mudar sus entrenamientos, el próximo 3 de julio, a las instalaciones del club Aguasal en Higuerote (estado Miranda), donde comenzarán con el exigente acondicionamiento físico y el trabajo futbolístico.
"Esa pretemporada en Aguasal tendrá dos turnos diarios y algunos días tendrán hasta tres turnos en los que se incorporarán trabajos físicos en el gimnasio para alcanzar el máximo de sus condiciones", explicó Plasencia a la jefatura de prensa del conjunto capitalino.
Plasencia, quien suplió en el banquillo a Eduardo Saragó, advirtió que "será un trabajo fuerte de acoplamiento en lo estratégico, en lo táctico, en lo futbolístico y en lo humano como grupo".
El conjunto sucrense, que regresará a la capital el 25 del venidero mes, ya tiene programado una serie de partidos amistosos con rivales que se darán a conocer en los próximos días.
Plasencia no ocultó su satisfacción por las contrataciones que ha logrado la gerencia del Petare. El último en llegar fue Carlos Salazar, procedente del Deportivo Anzoátegui.
"Los nuevos fichajes han servido para sustituir a los jugadores que salieron. Tenemos talento de sobra", dijo.
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